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GUERRA DE PRECIOS Y REVISIONES DE GRADO: LAS INFECCIONES DEL SISTEMA.

El sistema de atención a la dependencia recibe mazazos tanto desde dentro como desde fuera del mismo.


Revisiones de grado: ¿Modificación a la baja encubierta de tarifas?:

 

         También ponemos sobre el tapete un grave doble problema -que ya incide y va en aumento- que son la incidencia del nuevo baremo de valoración del grado  así como el el tiempo excesivo en resolver las peticiones de revisión del mismo que legalmente puede alejarse fácilmente hasta los 6 meses. Estas dos cuestiones, que ya se expusieron al Director General del IMSERSO, distorsionan la foto de la realidad y enmascaran la necesidad asistencial de la persona al día del ingreso respecto de los recursos básicos que necesita. Denunciamos muy clarito que es un nuevo mazazo a los dependientes, pero en esta ocasión utilizando un intermediario, colaborador necesario para cometerlo y que no es otro que el silencio de las propias entidades proveedoras de servicios… que se convierten en cómplices suponemos que involuntarios.

        

         Todos sabemos que las empresas están con el agua al cuello. Ya estamos viviendo  un “zoco” ofreciendo plazas con precios/estancia/residente sospechosamente bajos que requerirían pensar en  el porqué está pasando y si hay trampa  en estas ofertas o no.

 

         Todos sabemos también que estas ofertas son casi imposibles con los costes actuales. Hay que decirlo sin ambigüedades y quien primero tendría que hacerlo son las propias organizaciones empresariales. Como también hay que denunciar con claridad que las revisiones de grado -que en ocasiones lo rebajan-, implica a efectos prácticos una disminución de ratio asistencial con lo que se aboca a desasistencia porque  una de dos: si  cumples la ratio que correspondería tendremos disminución de profesionales o si por el contrario quieres ir más equilibrado de equipo asistencial arruinarás la entidad porque es inviable económicamente… mal rollo por donde lo cojas.

 

         Y aquí un recordatorio importante, más de lo que parece según hemos detectado en las reuniones que mantenemos: La ratio de personal es anual y se hace en función de la media ponderada de los usuarios del centro, recordemos la norma,

 

         “La ràtio exigida serà la mitja ponderada en funció del nivell d’intensitat d’atenció de les persones grans dependents. Serà exigible per a totes les places ocupades com a residència assistida estimant que les persones amb règim privat conserven la mateixa ponderació de nivells d’intensitat d’atenció.”

 

         Os aconsejamos repasar que quiere decir “media ponderada”,…¡que no media!,  y su cálculo real que obedece a una fórmula determinada. En este enlace puedes encontrar como hacerlo. 

 

http://www.gyplan.com/es/weighted_mean_es.html

 

         Desde el sector profesional afloramos ésta denuncia y no dudamos de la contundencia y claridad en los posicionamientos que al respecto tendrán las diferentes entidades para que no existan sombras de duda. Si ésta “jibarización” a medio plazo es inducida desde y por BSiF nadie debe ser ni cómplice ni convidados de piedra. Nosotros desde el nuevo estatus jurídico de ASCAD haremos lo que esté en nuestras manos para seguir en la defensa de la dependencia.